sábado, 2 de agosto de 2008

LOS RECLUSOS TAMBIEN ESCRIBEN

UNA FERIA DEL LIBRO CON DEMASIADOS IMPASES

Aparte del mal sabor que dejó el entredicho entre los organizadores y ALPE, aparte de lo poco atractivo de muchos "estands" y actividades, ahora resulta que también tenían "ascos" a los escritores presos

Finalmente, los ganadores del concurso literario para gente en la cárcel "Arte y Esperanza 2007" fueron premiados. La ceremonia se llevó a cabo en las instalaciones de Petroperu. Fue una ceremonia emotiva y pacífica en donde los premiados dijeron algunas palabras, cada cual tan emocionado como los otros. Los motivos por los que se llega a la cárcel pueden ser varios, y, si la administración de justicia no fuera siempre tan discutible, nadie pondría en duda su aplicación. Como no es así, no queda de otra sino recordar que a cualquiera le puede pasar.
Ahora bien, las razones por las escribe son diferentes; lo importante para la literatura es buscar la manera de separar la paja del trigo... y eso es tan difícil siempre. Luego de ello, a la literatura no le corresponde atribuirse el papel de sensor moral, sino de receptor de la calidad literaria.
Sin embargo, este razonamiento elemental no estuvo presente entre los administradores del Jockey Plaza quienes negaron sus instalaciones para llevar a cabo la ceremonia de premiación en la Feria Internacional de Libro de Lima. No está muy claro el papel de cada cual, pero de no haber voluntad no la hubo, sino hasta después de mucho revuelo, para variar. Por un momento, algunos pensamos que era cosa de mandatos legales; no obstante la ceremonia en las instalaciones de Petroperú anulan esas especulaciones. Sencillamente los marginaron por ser reos, aunque su actividad de escritores fuera una muestra de un proceso de socialización encomiable.

Alberto Gálvez Olaechea lleva 14 años recluido en el penal Castro Castro por el delito de terrorismo. Él fue el ganador del concurso de cuentos. La historia se llama 'El Chato’. “Somos seres humanos que buscamos reinsertarnos en la sociedad. La actitud del Jockey Plaza al no querer premiarnos en público, y luego permitirlo, pero bajo condiciones inhumanas, es repudiable. Gracias a Petroperú y, sobre todo, a los medios de comunicación, porque ahora percibimos en ellos más solidaridad”, manifestó.
Los otros ganadores fueron Juan Alonso Aranda y Julio Rodríguez, también condenados por terrorismo. Ellos agradecieron el apoyo de la prensa. En otro momento, ironizando, le dieron las gracias al Jockey Plaza por haberles negado el ingreso.

1 comentario:

Anónimo dijo...

richard eres un buen profesor. me gusto mucho el articulo sobre la contaminacion en china .