viernes, 26 de febrero de 2016

"República de La Papaya", de Gustavo Rodríguez (Comentario)


República de La Papaya”,  de Gustavo Rodríguez, (Editorial Planeta, 2016)  ha sido una de las novelas que he alcanzado a leer en estos pocos días de descanso previos al inicio de las clases. Ha valido la pena las horas dedicadas a su lectura.
En la novela se cuenta la historia de una asesora política Paula Patricia Yáñez, (La Papaya), quien intenta llevar a la primera dama de un país a la presidencia, pero que en el camino descubre que su ex pareja, una estudiante llamada Loreto, se había involucrado sentimentalmente con otro de los candidatos. Esta situación genera un conflicto no solo en las emociones de la asesora; en general, se activan una serie de circuitos a través de los cuales se descubre el lado aciago en el que se mueve la política. Desfilan una serie de  personajes, desde candidatos, periodistas, empresarios que se involucran en conspiraciones para favorecer a unos o a  otros, según sus intereses. No hay héroes ni villanos definidos. Como suele suceder en estos ámbitos, todo se mueve en un espacio gris.

La novela alcanza  un valor adicional porque coincide  con el periodo electivo que se está viviendo en el país. Sin embargo, hay que anotar que este hecho resulta solo una peculiar coincidencia.  Se sabe bien que el proceso creativo, la redacción y la corrección de una buena novela toman su tiempo, el que se necesite, sin concesión alguna con otro asunto que el de su propia maduración literaria. Aunque en este caso, se celebra la fortuna de la coincidencia, la  que debió hacer sonreír a los editores.

Ahora bien, más allá de esta anotación extraliteraria, en esta su quinta novela, Gustavo Rodríguez no solo consolida su madurez narrativa, también continúa con pulso firme en la exploración del ser humano y  su confrontación  con la  sociedad contemporánea, sociedad en constante "ebullición". Lo que provoca, evidentemente, una sucesión de conflictos en cada individuo.

Digo esto mientras recuerdo "La semana tiene siete mujeres" (2010) en donde se notaba las pinceladas  de una sociedad aún llena de prejuicios raciales.  También creo haber  percibido ese sentido exploratorio en "Cocinero en su tinta" (2012) en el que se mostraba ya no solo al individuo, sino a un país, en la búsqueda de algún tipo de reconocimiento a como dé lugar. 
En esta, su reciente novela, me atrevo a afirmar que su exploración continúa en esta  historia  de conflictos políticos y de campañas publicitarias que confrontan al ser humano con lo mejor y lo peor de su naturaleza.

Desde mi modesta opinión de Escribidor, recomiendo plenamente la lectura de la esta novela. Valdrá la pena. 

jueves, 18 de febrero de 2016

Monólogos Femeninos (Presentación en Lima)


Lapsus de Toledo es una asociación cultural establecida en la ciudad de Toledo, España que ha ampliado sus horizontes abriendo Lapsus de Toledo con sede en México y Lapsus de Toledo con sede en Perú. Su objetivo es crear un espacio de estudio e investigación sobre el quehacer psicoanalítico.
Leo en presentación de su página que Sigmund Freud descubrió el inconsciente y Jacques Lacan elaboró una nueva teoría basándose en los descubrimientos freudianos. La propuesta de esta asociación  se establece a partir del pensamiento de estos dos grandes psicoanalistas.
Pues bien, me alegra mucho comentar que,  en concordancia con esta propuesta,  desde hace un buen tiempo, un destacado grupo de escritoras peruanas  ha echado a andar este proyecto en nuestra capital.  Entiendo que la propuesta ha estado yendo por buen camino. Felicitaciones.

La primera intención fue buscar una aproximación entre literatura y psicoanálisis a través de la vida y obra de personajes literarios. Propuesta que les debe haber tomado una enorme labor de investigación multidisciplinaria. La poetisa y narradora Ana María García alcanzó a  contarme  que, como estrategia de trabajo,  se decidió que  cada escritora desarrolle su propuesta individualmente para luego discutirla en reuniones posteriores y, de esa manera, enriquecerse mutuamente.  Por supuesto, que han contado con el apoyo amigos y asesores. Antonio González Montes, como asesor literario; Alberto Cruzalegui, como psicoanalista; Joseph Dager,  como historiador. El resultado de este esforzado y delicado trabajo seguro que debe producir – a la larga -  una valiosa documentación. La relación entre psicoanálisis y literatura es siempre un tema que llama mucho la atención.

Es en este sentido que me entero de que el siguiente paso será la dramatización de estas experiencias con el título de Monólogos Femeninos. Para ello han logrado contar con la asesoría de Víctor Prada quien,  con generosidad, ha aceptado preparar a las escritoras que (excepto tres de ellas) no son actrices. Lo que hace que el reto sea interesante y la aventura signifique mayor riesgo, pero bien valdrá la pena.
Las escritoras vinculadas con este proyecto son valiosos nombre literarios a quienes – en su mayoría - tengo el gusto de conocer.  Ana María García, Amalia Cornejo, Alina Gadea,  Jeamel Flores, Daniela Ferreyros, Liliana Miranda, Carmen Navarra, Marita Palomino, Elena Pasapera, Alicia Saco, Eliana Vásquez, Sarita Ballón entre otros importantes nombres.

Para la dramatización, se han elegido cinco personajes de la historia, cuatro de la literatura universal, tres de la mitología griega. Personajes de la historia como María Jesús Alvarado, Virginia Woolf, Sor Juana Inés de la Cruz, Teresa de Avila, Lola Flores. Mitológicos como Yocasta (Edipo Rey), Medea, Antígona. Literarios como Emma, de Madame Bovary, Nora, de Casa de muñecas, Esmeralda, de Nuestra señora de Notre Dame, Rosita, de Doña Rosita la Soltera.

El día de la presentación (que por ahora es única fecha) será el 3 de marzo a las 7 de la noche, en el teatro García Lorca del Centro español del Perú.
No solo están invitados. Considero – con perdón del énfasis  -  una obligación cultural la asistencia. La Asociación tiene todo el ánimo de seguir con el proyecto y hacer nuevas presentaciones. Deja abierta la invitación a todos los que  quieren asistir a sus reuniones, participar con sus personajes y, de esa manera, enriquecer al grupo.

Mis felicitaciones a las escritoras y a todo el grupo de profesionales embarcados en este proyecto. La invitación para asistir está hecha e insistiremos en ello en los siguientes días.