lunes, 8 de diciembre de 2008

El cine peruano

Ricardo Bedoya es uno de los críticos de cine peruanos cuya crítica se constituye en plural y razonable. La labor del crítico, en el medio peruano, ya es una tarea difícil, en parte por las susceptibilidades, en parte por no tener una visión amplia de las posibilidades que el cine da al receptor, es decir, por considerar la crítica como una labor intelectual por encima del resto de mortales que ven una película con el simple placer de la distracción. Cuántas veces uno de nosotros, aficionados al séptimo arte, hemos visto destrozada la película que días o noches antes vimos con diversión o tristeza. En esas ocasiones, la crítica se tornaba ácida, porque no cumplía con los estándares cinéfilos o despectivamente erudita, porque la película no recordaba ninguna otra o no dialogaba con una tradición o elogiaba-imitaba-basaba en alguna obra maestra o en una técnica-propuesta de algún director de culto. Esta ceguera en los críticos los aleja de esa informe masa de espectadores que utilizan los adjetivos  "buena", "excelente" con la sinceridad y apoyo que los sentidos y las emociones les dictan. Felizmente, esa masa crítica no se queda en silencio. En algunas ocasiones, leyendo alguna crítica en los blogs de cine, ante una certero comentario como los antes mencionados, los lectores arremeten contra el crítico en un saludable enfrentamiento de gustos, lid infinita. 

Una buena crítica deberá siempre, tal vez me esté equivocando, proporcionar al interesado herramientas que ayuden a digerir o saborear mejor la película. Esta debería ser la labor del crítico, del buen crítico. Ricardo Bedoya en su blog "Páginas del diario de Satán" aporta al cine peruano con una serie de razones que intenta explicar por qué las últimas películas peruanas no han tenido el éxito que sus creadores hubieran esperado, tarea obligatoria de todo buen crítico.

1- Fueron muy mal lanzadas. Los anuncios en televisión son indispensables para las películas peruanas y ahora los canales de TV no aceptan canje publicitario porque tienen mucha demanda de los anunciantes.
2- No es posible que se estrenen tantas películas peruanas juntas.
3- Es la peor época del año para el negocio del cine. La temporada veraniega norteamericana de blockbusters ya pasó y al final del año el público está con otras preocupaciones. Por eso los distribuidores norteamericanos se ponen generosos y ceden espacios para otros lanzamientos (cintas peruanas y títulos de distribuidoras peruanas).
4- El público más joven ha gastado su plata en la seguidilla de conciertos.
5- Los exhibidores no permiten que una película se “caliente” y vaya incrementando su asistencia. Si no funciona en los primeros días, sale irremediablemente o queda en horarios imposibles.
6- La crítica no las apoya.
7- La crítica opta por el estricto juicio estético y no le importa el futuro industrial del cine peruano.
8- La crítica se ha separado del gusto del público. Se dedica a defender películas como 
Paranoid Park que no entienden ni los espectadores cultivados.
9- Los directores de cine se alucinan artistas, creen estar haciendo obra de autor, y no se dan cuenta que al público le interesa otra cosa.
10- Las películas se limitan a reciclar las fórmulas del viejo populismo de amigos borrachos y jóvenes marginales del cine peruano de hace treinta años.
11- Fallan los guiones: no enganchan al espectador.
12- Hace falta un cine de géneros.
13- Las historias son didácticas y los actores exageran y sobreactúan.
14- El peruano es un mercado minúsculo que sólo permite hacer películas muy baratas, pero aun así es riesgoso. Antes un éxito podía bordear los 300,000 espectadores, y un fracaso los 60,000 espectadores. Ahora se raspa los 20,000 espectadores.
15- El cine peruano que interesará en el futuro es el que se verá a través de la Internet y los celulares.
16- Las películas peruanas no tienen suspenso ni tensión.
17- El público antes se reconocía en los personajes y celebraba sus modos de ser y de hablar; ahora esos personajes representan ideas abstractas o no representan nada.
18- "Vi dos y eso es suficiente."
19- Es lo mismo que está pasando en Argentina y Chile: se hacen películas con apoyos oficiales pero las ve muy poca gente.
20- 
Dioses y Vidas paralelas sí han tenido aceptación porque un sector de espectadores se ha sentido identificado y tocado por ellas.
21- Fracasa el cine peruano concebido para ser mostrado en los multicines que son espacios para otro público y otro cine; los cineastas deberían aprender el ejemplo de los cineastas de las regiones que hacen películas con bajo costo y un sentido claro de su “público objetivo”.


4 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola quisiera pedir autorización para usar la imagen de este post para un grupo de Facebook que se llama Luchemos por un cine peruano para todos: No a la ley Raffo. Espero su pronta respuesta. Mil gracias.

Robinson

Richar Primo dijo...

La imagen no me pertenece. Está liberada para quien necesite de ella. Pueden usar la imagen y el contenido si los fines son culturales.
Saludos
Ríchar Primo

artcrea dijo...

HOLA, LA ILUSTRACIÓN, ES PROPIEDAD INTELECTUAL DE ARTCREA. ESTUDIO DE DISEÑO Y PUBLICIDAD QUE DIRIJO. SALUDOS CORDIALES. ARTURO ACOSTA

artcrea dijo...

la ilustración es propiedad intelectual de ARTCREA, estudio de publicidad y diseño que dirijo. Arturo Acosta