Es un acierto que un intelectual, y no sólo un escritor como afirman algunos políticos peyorativamente, de la talla de Mario Vargas Llosa dirija la implementación del Museo de la Memoria tan necesario después de tantos años de guerra y olvido. No solo porque es uno de los peruanos más ilustres, lo cual podrá facilitar el canalizar donaciones de cualquier índole, sino también porque pertenece a una generación que tuvo en sus manos y ante sus ojos una violencia en un inicio poco comprendida por las élites políticas e intelectuales. Esta responsabilidad les devuelve la oportunidad de hacer; enfatizo, la oportunidad de hacer, y ya no sólo la de hablar o teorizar o criticar o apoyar o callar, que durante los años 80 y 90 fue tan practicado. Este hacer que empezó con el Informe de la Comisión de la Verdad y Reconciliación, liderada por el exrector de la Católica, Salomón Lerner. A los responsables de esta tarea, nuestro apoyo incondicional, y nuestro deseo que el museo sea el reflejo de todos los peruanos que sufrieron esta guerra. Ya sin pre-juicios o generalizaciones nefastas. Que los militares y lá Policía tengan la oportunidad de mostrar a sus hérores, que también son los nuestros y que deberán ser honrados como tales; que los deudos tengan un espacio para su verdad; y que los que perpetraron esta tragedia sepan que esto nunca más se tolerará en el Perú porque los peruanos aprendimos que ese no era el camino. Eso espero.
El Gobierno decidió poner punto final a la controversia en torno a la construcción de un Museo de la Memoria que conmemore a las víctimas de la guerra interna entre los años 1980-2000 y finalmente aceptó la donación de 2 millones de dólares de Alemania destinado a ese proyecto.
Para ello, el Ejecutivo dispuso la creación de una Comisión de Alto Nivel que se abocará a diseñar, organizar, implementar y gestionar el proyecto, la cual estará presidida por el escritor Mario Vargas Llosa.
Como se recuerda el laureado novelista es uno de los más férreos defensores de la obra y crítico del rechazo a la donación y los argumentos esgrimidos por algunas autoridades como el ministro de Defensa, Ántero Flores Aráoz, con quien tuvo un intercambio mediático de argumentos.
Entre las figuras que acompañarán en esta labor al literato se encuentran el ex presidente de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), Salomón Lerner Febres, monseñor Luis Bambarén, el pintor Fernando de Szyszlo, el constitucionalista y ex miembro de la CVR Enrique Bernales y el antropólogo Juan Ossio Acuña.
Según detalla la resolución todos ellos laborarán ad honorem, es decir, no recibirán remuneración por este proyecto.
Entre las funciones de la comisión está coodinar con las entidades competentes y el Gobierno Federal de Alemania las acciones necesarias para implementar y operar el referido museo. Además deberán "velar porque el museo represente con objetividad y espíritu amplio la tragedia que vivió el Perú a raíz de las acciones subversivas de Sendero Luminoso y el MRTA".
El principal objetivo será entonces "mostrar las consecuencias que resultan del fanatismo ideológico, la trasgresión de la ley y la violación de los derechos humanos".
Fuente: RPP
No hay comentarios.:
Publicar un comentario